Durante un reciente foro sobre educación realizado en el Congreso de la República, el parlamentario Édgar Ochoa alertó sobre los problemas a los que se enfrentan los estudiantes que pertenecen a pueblos originarios y como muestra de la situación dio el siguiente dato: “Por lo menos, existen 4 de cada 10 estudiantes de secundaria [de pueblos originarios] que termina […] después de los 18 años”. OjoPúblico concluye que esta afirmación es verdadera. Reproducimos este informe.
El documento, que data de abril del 2019, fue emitido por el Minedu a solicitud del parlamentario, quien, como integrante del Grupo de Trabajo Pertinencia Cultural del Derecho a la Educación de la Comisión de Cultura y Patrimonio Cultural del Congreso, requirió en dos ocasiones un balance sobre los avances en la implementación de la política educativa intercultural bilingüe.
El informe analiza los cuatro ejes de la Política Sectorial de Educación Intercultural y Educación Intercultural Bilingüe (aprobada por Decreto Supremo N° 006-2016-MINEDU): Acceso, permanencia y culminación oportuna de estudiantes de pueblos originarios, Currículo pertinente y propuesta pedagógica, Formación inicial y en servicio de docentes para la EIT (Educación Intercultural para Todas y Todos) y EIB (Educación Intercultural Bilingüe) y Gestión descentralizada del servicio y participación social en la EIT y EIB. Precisamente, el primer eje evaluado incluye el dato que se analiza para esta verificación.
Sobre la base de la Encuesta Nacional de Hogares de los años 2015 al 2018, el Minedu calculó los indicadores de acceso, permanencia y culminación oportuna de los estudiantes de pueblos originarios. Según los resultados, el 54.8% de adolescentes indígenas que hablan una lengua originaria culminó la secundaria de manera oportuna. Esto es, dentro de la edad prevista, que se calculó entre 17 y 18 años para estudiantes indígenas, según explicó el especialista en investigación estadística, Víctor Ballena, quien realizó estas proyecciones para la Dirección de Educación Intercultural Bilingüe (DEIB).
A partir de este último dato (54.8% de culminación oportuna) es que el congresista dedujo que el porcentaje restante (45.2%) indicaría la situación de aquellos estudiantes indígenas que hablan una lengua originaria y no culminan de manera oportuna su educación secundaria.
Ballena, economista de la DEIB, confirmó a OjoPúblico que esta lectura de dicho indicador es correcta, y, en consecuencia, se puede afirmar que 4 de cada 10 estudiantes de pueblos originarios no culminan los estudios secundarios en la edad idónea.
En el caso del nivel primario, el documento también da cuenta de que, en 2018, el 69.6% de niños indígenas que hablan una lengua originaria culminó a tiempo el nivel de educación primaria.
Con relación al indicador de acceso a educación, el informe registra que el 83.4% de jóvenes indígenas en edad escolar estaba matriculado en nivel secundario en 2018 (tendencia en aumento en relación a años anteriores), frente al 96.6% de niños y adolescentes indígenas matriculados para el nivel primario (con una tendencia variable, como se ve en el siguiente cuadro).
Sobre el indicador de permanencia, en 2018, el 94.9% de adolescentes indígenas terminaba el año escolar de secundaria, frente a un 99.6% de estudiantes indígenas de nivel primaria.
Ballena precisó que obtuvieron estos indicadores luego de cruzar los datos de los módulos sobre Educación y Salud de la Encuesta Nacional de Hogares. “Con el módulo de salud determinamos la edad, y con el de educación se identificó la lengua que habla el niño y qué nivel está estudiando”, explicó. Sin embargo, admitió que, si bien la ENAHO recoge información de todas las regiones, los cálculos que hizo para este informe no permiten observar en detalle los porcentajes diferenciados por región.
El especialista comentó también que esta información corresponde a aquellos adolescentes que son indígenas y hablan lenguas originarias, y que no necesariamente accedían a escuelas interculturales bilingües.
Por su parte, Oscar Chávez Gonzales, coordinador del Equipo de Desarrollo Educativo de Lenguas de la DEIB, y quien también aparece como firmante del informe del Minedu, explicó a OjoPúblico que una de las principales razones para que los estudiantes de pueblos originarios terminen fuera del plazo previsto es la repitencia del año escolar. Esto debido a que los contenidos educativos del nivel secundario son en su mayoría en castellano, a pesar que no dominan necesariamente la lengua.
“Lo que pasa es que la educación primaria que llevaron es de pésima calidad. Ingresan a secundaria sin poder leer bien en lengua castellana porque siempre se ha trabajado en un bilingüismo. Por ejemplo, [durante la primaria] se ha utilizado la lengua originaria en la parte oral para hacer entender el contenido de materiales en castellano. Por tanto, se llega a la secundaria con muchas limitaciones”, agregó.
El otro factor relacionado con este problema es la escasez de docentes bilingües que puedan enseñar a los estudiantes en su lengua originaria. “[Los estudiantes] no han tenido una buena base de primaria, ni consolidando su lengua materna ni afianzando una segunda lengua como el castellano. Llegan a la secundaria con limitaciones y por tanto van a tener problemas en su rendimiento. Como no hay secundarias interculturales bilingües, en estos momentos la secundaria es castellanizante”, indicó Chávez.
A la fecha se estima que existen más de 27 mil centros educativos interculturales bilingües en el país. Respecto a la demanda en capacitación que tienen los docentes de estas escuelas, según Chávez solo se llega al 8% de docentes que necesitan un acompañamiento sostenido. Así también, existe una brecha de docentes especializados en educación intercultural bilingüe que asciende a más de 11 mil, según confirmó Chávez y se precisa en el Informe N° 00091-2019 del Minedu.
Consultada para esta verificación, Francesca Uccelli, investigadora principal del Instituto de Estudios Peruano (IEP), comentó que la cifra dada por Ochoa tenía coherencia con la realidad, ya que en las zonas rurales existía un marcado desfase entre la edad y el grado que cursan los niños y adolescentes.
Uccelli agregó que, según una estimación que realizó junto a la especialista Carmen Montero, con base en la Encuesta Nacional de Hogares y el Censo Escolar del Minedu correspondientes al 2017, los alumnos con atraso escolar en quinto de secundaria de la zona rural se sitúan en un 22.7%, a diferencia de la zona urbana en que esta llega solo al 7%. Con relación a todo el nivel secundaria, el atraso se presenta en 6.8% de los estudiantes del ámbito urbano, mientras que en 21.8% en la zona rural.
“El atraso escolar se explica muchas veces por la repitencia. […] El tema con los estudiantes rurales o indígenas es que muchas veces no tienen secundaria en sus comunidades y al ir a las ciudades los hacen repetir porque su preparación no está acorde con la demanda de la zona urbana”, precisó la investigadora.
Un motivo central para explicar la problemática es la ausencia de secundarias bilingües, coincidió Uccelli. Esto debido a que las escuelas secundarias de educación intercultural bilingüe existen solo a nivel normativo, pero en la realidad no se encuentran habilitadas. Por esto, los estudiantes de pueblos originarios se ven forzados a aprender en castellano.
El parlamentario Ochoa añadió que el nivel de logro de aprendizajes en las escuelas para los estudiantes de lengua originaria ha disminuido. Como ejemplo, citó los resultados de la Evaluación Censal de Estudiantes del Minedu. “De un año a otro, en los niños que hablan Awajún, el nivel de comprensión lectora de su lengua originaria ha disminuido. En 2016, el 32% estaba en un nivel satisfactorio y, en el 2018, solo 18% alcanzó esa condición. En los estudiantes aimaras, al 2016, el 37% tenía un nivel satisfactorio; ahora es cero. Y en el caso del grupo quechua del Cusco-Collao, en 2016, el 38% tenía nivel satisfactorio, mientras que en el 2018 cayó a 19%”, indicó.
Esta prueba también aporta información sobre el nivel de aprendizaje de los estudiantes del 2° año de secundaria, diferenciado a aquellos que hablan una lengua originaria. En el área de Ciencia y Tecnología, la mayoría de este sector de estudiantes (52.2%) se encontró en el segundo nivel más bajo, referido al inicio del proceso.
En el área de Ciencias Sociales, el 45.8% de estudiantes de habla originaria se ubicó en el indicador más bajo, catalogado como ‘previo al inicio’, que significa que los estudiantes no han empezado siquiera el proceso para lograr los aprendizajes esperados. En el caso de los resultados de Matemáticas, el 65.7% de adolescentes de este grupo se encontró también en el nivel previo al inicio. Respecto a la evaluación de Lectura, el 52.3% de estudiantes se encontró a penas en el nivel de previo al inicio, y el 35% al inicio del proceso. Solo el 2.6% alcanzó un nivel satisfactorio de aprendizaje.
Tras lo expuesto, OjoPúblico concluye que la afirmación del congresista Édgar Ochoa respecto a que, por lo menos, 4 de cada 10 estudiantes de secundaria que habla una lengua originaria termina después de los 18 años es verdadera.
Fuente: Ojo Público
Foto: Congreso de la República